RESUMEN
La ortodoxia supone que
muy pocos animales nohumanos son personas, si es que acaso lo es
alguno. La categoría de persona está restringida a las criaturas
autoconscientes: los humanos (mayores de cierta edad) y posiblemente
algunos de los grandes simios y los cetáceos. Argumentaré en favor
de rechazar esta ortodoxia por estar basada en una concepción
errónea del tipo de autoconciencia relevante para la personalidad.
Sustituir ésta por un sentido de autoconciencia relevante requiere
que aceptemos que la personalidad está mucho más extendida a lo
largo del reino animal.