lunes, 21 de febrero de 2022

El niño y el zorro: tratando de entender nuestra violencia hacia los animales

Cuando era niño, uno de mis placeres secretos era sentarme durante horas a estudiar con detenimiento la colección de libros de fotografía de mi padre. Allí, en The Family of Man, Days to Remember, y otros, vi revelada la extraña y maravillasamente variopinta condición humana, al menos en la forma reflejada por los fotoperiodistas profesionales de mediados del siglo pasado: niños en Bombay levantando sus caras sonrientes hacia la lluvia; Jackie Robinson, "primer jugador negro de las Grandes Ligas de Béisbol"; el primer televisor. Había también muchas fotos inquietantes de dolor, tragedia y violencia, imágenes imborrables de asesinatos y suicidios por parte de la mafia, de terribles accidentes industriales y de "la guerra de Indochina". Pero de entre todas ellas, una imagen en particular me obsesionó más que ninguna: un grupo de personas del Medio Oeste de pie, formando un círculo, sobre la nieve, vitoreando a un niño de unos siete años que golpea a un zorro hasta la muerte con un bate de béisbol.