miércoles, 10 de julio de 2019

¿Aprendizaje social en insectos no-coloniales?


RESUMEN

El empleo de información social ha generado gran interés reciente y se ha demostrado que tiene implicaciones importantes para la ecología y la evolución de las especies (Galef Jr. y Giraldeau 2001; Giraldeau, Valone y Templeton 2002; Brown y Laland 2003; Kendal et al. 2005; Danchin et al. 2004; Dukas 2004). Aprender a través de otros acerca de los depredadores o del riesgo de depredación puede proporcionar información de supervivencia de bajo coste, y se espera que tenga recompensas adaptativas en cualquier especie donde los congéneres sean observables y se comporten de manera diferente bajo un riesgo de depredación. Sin embargo, el aprendizaje social y el uso de la información social en general se han restringido en gran medida a los vertebrados (Galef Jr. y Giraldeau 2001; Giraldeau, Valone y Templeton 2002; Brown y Laland 2003; Danchin et al. 2004; Galef Jr. y Heyes 1996; Box y Gibson 1999; Griffin 2004; pero véase también Webster y Fiorito 2001; Seeley 1998; Leadbeater y Chittka 2005; Worden y Papaj 2005; Goldberg 1983; Isingrini, Lenoir y Jaisson 1985; Langridge, Franks y Sendova-Franks 2004). Aquí, mostraremos cómo los grillos adaptan su comportamiento de evitación de los depredadores después de haber observado la conducta de otros más experimentados y cómo mantienen estos cambios de comportamiento de forma duradera una vez desaparecidos los demostradores. Estos resultados apuntan hacia el aprendizaje social, una contingencia nunca antes mostrada en insectos no-coloniales.